Cuando por distintos motivos vienen a consulta las parejas, algunas veces hablan y muestran todas sus quejas mutuamente, pero no mencionan el tema de la sexualidad, como dando entendido que en esa área tampoco pasa nada interesante, pareciera que hablar de sexo no es tema central, sin contemplar la posibilidad que es parte de la vida de la pareja, y como tal juega un papel en el conflicto o pedido de ayuda que los trae.
Hoy en día ese tema dejó de ser prohibido, pero aún así cuesta hablar de ello. Máxime si existe alguna “disfunción” sea ésta atinente al hombre o a la mujer, existe la tendencia a ocultar, o atribuirla a causas puntuales tales como el estrés, rutina, cansancio, falta de deseo, etc.
Una de las más frecuentes es la “disfunción eréctil”, que padecen muchos hombres, y a pesar del apoyo y comprensión que reciben de su pareja son reacios a la consulta con un especialista. Y en el caso de la mujer la “anorgasmia” o ausencia de orgasmo.
Lo que sucede es que muchos varones lo sienten como una falta de masculinidad, y en el caso de algunas mujeres sienten culpa y hasta suelen seguir fingiendo y evitan hablar al respecto.
Se van generando distintos sentimientos que van erosionando la relación, hasta un punto que se origina una brecha imposible de salvar.
Aquí cabe la pregunta: ¿porque tanta dificultad para hablar, si los “medios” están cargados y recargados de información al respecto?, información no demasiado ajustada a las necesidades de las personas y muchas veces saturada de una especie de “chabacanería” que logra ser hasta grosera en su más amplia definición.
Hablar es sanador, cuando se busca una solución juntos, reduce la angustia y mejora la comunicación de una manera íntima, en espacios reservados totalmente alejados de lugares públicos, donde muchas veces sin respeto y consideración se ventilan esos temas, ajenos a realidades concretas, universalizando criterios que nada tienen que ver con las distintas personalidades y realidades de vida.
Sugerimos:
- superar temores
- visitar un especialista
- buscar información
- perseverar
- superar el estado de ansiedad y vergüenza
- sentirse implicados y buscar a través del diálogo el camino adecuado
- evitar reproches que pueden terminar destruyendo la relación
- ayudarse en todo momento
- realizar un papel activo durante el tratamiento con el objetivo de resolver juntos las dificultades