Establecido en 1985, por la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Llegando a fin de año, el día del voluntario nos invita a reflexionar acerca de qué acciones concretas realizamos en favor de otras personas que tienen alguna necesidad.
Hace unos días, en el artículo VALIENTES, comenté mi anhelo de que dediquemos tiempo, dinero o conocimientos a alguna misión específica o personas que pasen por dificultades.
Generalmente, somos un pueblo solidario de emergencia, acudimos desinteresadamente a ayudar al prójimo en las catástrofes o accidentes. En la URGENCIA.
Pero el Voluntario Social implica asistir, prevenir y promover con eficacia y constancia, acciones en beneficio de otros grupos u ongs, y como consecuencia de la sociedad toda.
Un gran reconocimiento a los voluntarios por su ESPIRITU DE SERVICIO, especialmente a los Bomberos que luchan, entre tantas cosas, contra las adversidades del tiempo para salvar nuestro medio ambiente.
Valorizá tus disponibilidades, capacidades e intereses y averiguá en tu entorno, quienes necesitan lo que tenés para dar.
¡Que la pereza, el desánimo y la individualidad, NO te detengan!
¡Contagiémonos de quien tenga ganas de vivir, ansias de hacer el bien y contagiémos a otros!